Acaba de publicarse en Chile el volumen Novelas I, que compila las tres primeras novelas de la esencial escritora brasileña, las que están marcadas por su tono experimental y reflexivo. Se incluye Cerca del corazón salvaje, que marcó un hito en su época. En Culto revisamos su obra de la mano de dos especialistas.
por Pablo Retamal N. – Culto, La Tercera -13 MAY 2022

“Odio la popularidad, es algo pernicioso para los escritores”, dijo convencida de cada palabra en una entrevista de julio de 1976 a la revista argentina Crisis. Tampoco le gustaban las entrevistas, pero cuando lo hacía, Clarice Lispector daba cuenta de sus convicciones.

Sus respuestas eran algo así como un pequeño milagro, puesto que –según cita Crisis– tenía fama de ser desconfiada, dura, huidiza, de pocas palabras. Ella, quizás consciente de su impronta, lo reafirmó a la periodista que tenía la grabadora encendida frente a ella: “Todo lo que tengo que decir lo digo en mis libros. Sus colegas tienen razón”, amén de un carácter más bien introvertido: “Soy tímida, muy reservada”.

Aunque a su pesar, sobre todo tras su muerte en 1977, Clarice Lispector es una de las escritoras brasileñas más populares en Latinoamérica, comparable con otros nombres cruciales como Rubem Fonseca, Lygia Fagundes Telles o Machado de Assis. Novelista y cuentista, también se desempeñó como periodista en periódicos de Río de Janeiro lo cual era su principal fuente de ingresos. “De la literatura no se puede vivir en esta tierra”, apuntó a Crisis.

No nació en Brasil, sino que en Ucrania en 1920, aunque llegó con casi dos años de edad junto a sus padres, inmigrantes judío-ucranianos. Primero residieron en Recife, donde creció y adquirió el acento nordestino que la caracterizaba. Siempre se mostró orgullosa de haberse criado en esa zona. “El nordeste es más profundamente brasileño que el sur: Río o San Pablo. Está más ajeno a las influencias extranjeras”, dijo a Crisis.

Hoy, su trabajo literario se encuentra de vuelta en las librerías nacionales. La mexicana editorial Fondo de Cultura Económica (FCE) acaba de editar el volumen Novelas I, que reúne a Cerca del corazón salvaje (1944), El candil (1946) y La ciudad sitiada (1948), las tres primeras de su trayectoria. Esto se suma al volumen que el mismo sello editó el 2021, que compila todos sus cuentos, y al volumen que la española editorial Siruela sacó a las vitrinas titulado Todas las crónicas, que reunió su labor periodística, y que también se encuentra en Chile.

La escritora nacional Andrea Jeftanovic es una reconocida admiradora de Lispector, y comenta a Culto sus rasgos como novelista. “Es una autora absolutamente experimental, reticente a escribir novelas convencionales, en sus libros, que se ajustan más a tal categoría, la trama es mínima. Su obra se distingue por la exaltación de la vivencia interior y por el salto de lo psicológico a lo metafísico. Lo que se despliega es más una meditación existencial, es casi una lección de filosofía de la condición humana desde personajes cotidianos (mujeres, dueñas de casa, niños, jóvenes)”.

Por su lado, Florencia Garramuño, traductora y directora del Departamento de Humanidades de la U. de San Andrés de Argentina, y quien ha traducido a Lispector al castellano, explica a Culto. “Mientras que en las primeras novelas Clarice Lispector ejercita una indudable experimentación formal, concentrada sobre todo en el uso del lenguaje y en el adelgazamiento del acontecimiento para darle primacía a la subjetividad, en sus últimos textos, la debilitación de una trama narrativa y la incorporación de referencias biográficas tienden a construir una intriga que parece desnudarse de sus constricciones formales y ficcionales, como si se escribiera, como la misma Clarice lo propuso, ‘con un mínimo de trucos’”.

Jeftanovic agrega: “Creo que ha sido reconocida más tardíamente como novelista porque su profunda introspección y reflexión metafísica no entraba en sintonía con la euforia abarcadora y regionalista de las obras contemporáneas del Boom Latinoamericano (tampoco abierto a las autoras y disidencias), pero sí veo sintonía con el rupturismo de Rayuela, de Cortázar, o Tres Tristes Tigres, de Cabrera Infante. Y, claro, cabe decir que como cuentista o cronista también es excepcional. Se merecía un lugar protagónico desde siempre”.

Continuar al artículo original en : https://www.latercera.com/culto/2022/05/13/clarice-lispector-una-escritura-salvaje-e-introspectiva/

O descargar el artículo completo acá.